La Mancomunidad del Alto Palancia pondrá en marcha un proyecto piloto para medir la huella de carbono de los municipios afectados por los incendios registrados en la comarca en el verano de 2022. La iniciativa se enmarca en el convenio con la Diputación de Castellón para financiar actuaciones que palien las consecuencias sobre el medio natural a causa del fuego que calcinó más de 20.000 hectáreas en agosto de 2022, en los municipios de Bejís, Torás, Teresa, Viver, Jérica, Sacañet, El Toro y Altura.
El proyecto aspira a realizar un plan de reducción de la huella de carbono de los municipios afectados. Los incendios registrados en el último año en la comarca han emitido una enorme cantidad de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera. A esa circunstancia se une el efecto sobre el cambio climático, ya que la reducción de masa arbórea reduce la capacidad de captura del carbono e incrementa la absorción de calor terrestre, además de generar más erosión, pérdida de nutrientes y disminución de la materia orgánica.
Con la iniciativa emprendida desde la Mancomunidad, los municipios podrán tener un diagnóstico de sus emisiones contaminantes, con la posibilidad de plantear una estrategia que contribuya a reducir las emisiones, minimizar el impacto de los residuos y rebajar el consumo de energía y, en definitiva, impulsar planes locales contra el cambio climático.
En una primera fase se realizará la medición de la huella de carbono, a fin de que se puedan desarrollar actuaciones para compensar y absorber el dióxido de carbono, así como medir los consumos de combustibles sólidos y electricidad. A partir de estos datos, los municipios podrán sumarse al Registro de Huella de Carbono, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que recoge los esfuerzos de las empresas, administraciones y otras organizaciones en el cálculo, reducción y compensación de las emisiones de gases de efecto invernadero que genera su actividad. El registro también recoge una cartera de proyectos forestales con los que dichas organizaciones pueden compensar su huella.
En caso de ser necesario, se realizaría la verificación de la huella de carbono, una auditoría realizada por una entidad independiente capacitada para certificar los datos recabados de la emisión de dióxidos de carbono, de manera que se pueda demostrar ante otras instancias la veracidad de los cálculos realizados en cada uno de los municipios.
Tanto la Mancomunidad del Alto Palancia como la Diputación coinciden en la necesidad de desarrollar actuaciones turísticas que ayuden a los municipios afectados a contrarrestar los efectos de los incendios, con acciones dirigidas al fortalecimiento socioeconómico. La Mancomunidad considera que el turismo representa un eje estratégico para el desarrollo económico de la comarca, una vía de mejora para las condiciones de vida de la ciudadanía y un motor para la generación de renta y ocupación.
